El estado Cubano tiene entre sus objetos principales la supervivencia de la población en medio de un mundo desigual, en crisis, donde los más pobres sufren la peor parte. El bloqueo del gobierno de los EU contra cuba, es la peor de las situaciones, impidiendo la mayoría de nuestras relaciones comerciales.
En medio de esta situación, además de la generada este año por la pandemia de la Covid-19, los habitantes del archipiélago cubano se unen al llamado de su presidente Miguel Díaz Canel Bermúdez a pensar como país y a luchar todos juntos por la soberanía alimentaria.
Ana Nieto Aguilera es una mujer que está a tono con ese llamado y en una cuenca del río La Calabaza, en este municipio santiaguero de Guamá desarrolla el programa de la Agricultura Urbana.
“El aislamiento de la Covid-19 me dio tiempo para dedicarme a preparar un terreno pedregoso, pero con tierra, buena capa vegetal y materia orgánica acumulada por el arrastre de los ríos”: afirmaba ella
“Sembré plátano, yuca, boniato, frijoles, maíz y otros cultivos, y para resolver de momento, cerqué con varas amarradas, ya he comido de lo que planté. Ahora espero que llueva para seguir sembrando, en especial para recoger cosecha de vegetales el fin de año.” nos continua diciendo
Como está mujer miles de personas en Guamá aprovechan en poco espacio y enfrentan el reto de la intensa sequía, y con recursos tradicionales como cercas de postes con varas amarradas con bejucos, cierran un área que sin duda alguna será recompensada con el beneplácito de recoger una cosecha que no solo beneficia a la familia, sino además, al resto de la población.