Ese es el mensaje de los pioneros del Círculo de Interés dirigido por el miembro del Cuerpo de guardabosques Ismael Trujillo Aguilera.
Pioneros de la escuela Combate del Uvero motivaron a los invitados al acto nacional por el Día del Trabajador Forestal el pasado 21 de junio.
Los pequeños, pues son meñiques desde 1ro hasta sexto grado, hablaron sobre diversos temas vinculados a los bosques y su desarrollo, conservación y protección, de las afectaciones del hombre y del fuego y motivaron a todos, por el amor que le pusieron a su exposición, demostrando que hay identificación con una actividad que es centro de la vida de los habitantes de este municipio santiaguero de Guamá.
“Los tengo desde pequeños, ya que los incorporo desde 1er grado hasta 6to y van aprendiendo según pasa el tiempo y aprenden mucho, sobre todo a identificarse con el medio ambiente y el valor que los bosques tiene para la vida del hombre y su economía. Ellos enseñan a todos los valores patrimoniales de los bosques y lo que significan para la humanidad. Se forman como mejores personas, con un especial sentimiento por lo que les rodea, en el entorno montañoso de nuestro municipio”
Trujillo, como todos le conocen, es nativo de las zonas más intrincadas de la Sierra Maestra, y aprendió también a vivir entre los bosques, sus animales y a protegerlos y ese amor que creció con él, lo llevó a convertirse en guardabosques, para desde una trinchera de combate de primera línea, defender la existencia humana, porque eso es lo que se defiende en su Círculo de Interés pioneril de este tipo, un encuentro con los campesinos o un taller, donde se muestra el valor del medio amiente en que luchamos por la subsistencia, poniendo toda la naturaleza a nuestra disposición y no dañando sus grandes riquezas, donde los bosques, son un tesoro de primera importancia.