Resultó Guamá el primer municipio de la provincia Santiago de Cuba donde el Comité del Partido a ese nivel realizara el proceso de entrega formal del cargo de Primer Secretario. Ocasión relevante en el cual los guamenses le tributaron a Lázaro Expósito Canto, una cálida y emotiva despedida que, más que valorar los gestos materiales que se usaron como presentes de agradecimiento a su abnegada entrega durante el desempeño, resultó relevante la reclamación de interesantes creaciones literarias que tributaron a sus sentimientos, que no pudo sustraerse de la emoción recibida.
En la presentación de la ceremonia se expresó: “…es rudo como los vientos y lo exige la ocasión; pero desborda de amor con abrazos campechanos cuando sus buenos hermanos se ajustan el cinturón. Suman miles de ocasiones de imprevistos elocuentes, ha hecho insomne presente en los centros productivos y, aquellos que no han podido justificar lo indecente, tienen que cambiar la mente o ser del puesto excluidos….”
Así inició la ceremonia o acto de entrega de la responsabilidad en el cargo de Primer Secretario, que en lo adelante lo asume José Ramón Monteagudo Ruiz, quien expresó su compromiso de dar continuidad a la obra del prestigioso líder al cual le correspondía suceder.
El conductor de la actividad expresó: «De usted, Lázaro. Aprendimos, apoyarse en el razonamiento colectivo y la capacidad personal para tomar decisiones. Compartir con los subordinados las dificultades y los grandes esfuerzos….”
Emocionante también cuando un trabajador del Hotel Sierra Mar, José Manuel Rosales Díaz, dedicó íntegramente una décima que le caracterizó y resaltó las cualidades revolucionarias.
De esta forma, entre consignas, banderas levantadas y exclamaciones de: «Expósito te queremos. Este es tu pueblo», transcurrió ese momento de emoción y lágrimas.