La realidad de la nación con una pandemia que afecta la economía por los grandes gastos, se agravó ahora con los daños ocasionados con este evento tropical que afecto todo el país. Pareciera que no es suficiente y hasta la naturaleza que sometió a los habitantes de este santiaguero municipio a una intensa sequía, recientemente envió al evento meteorológico Laura.
Una preocupación para la Revolución, pero como diría el recién entrevistado Tilson Nápoles Espinosa ejemplo de consagración como trabajador: “Me acabó con mi siembra, pero voy a trabajar duro para recuperar lo que el ciclón me afecto. Seguro que lo haré.” Esa es la disposición de un pueblo aguerrido y rebelde acostumbrado a resistir ante todas las problemáticas.
Septiembre será un mes de siembra y de recolección de café, de la continuación del curso escolar y de otras tareas, y para enfrentar todo eso, el sacrificio del pueblo de Guamá, es la única fórmula para ganar esa batalla.
Existe confianza para esa victoria en las palabras de Luis Aponte Campo quien dirige la actividad de Plan Turquino en la sede del gobierno de Guamá cuando en medio de las tareas de recuperación ante las consecuencias provocadas por Laura, expresó que : “siempre habrá dificultades, pero como ahora mismo se levantan los postes caídos, que llevan la electricidad a cada lugar, sabremos talar todos los árboles tumbados por el viento, recogeremos las producciones en peligro, apoyaremos en la reparación de las viviendas y estructuras afectadas y garantizaremos la recuperación, como lo hemos hecho cuando este municipio ha sido afectado por un ciclón, o por otra dificultad”.
En esta batalla cuando sigue la búsqueda de otros daños ocasionados por este fenómeno natural, se continúa la tarea de recuperación, siempre con la convicción de que ante una dificultad, la unidad y el sacrificio, son la mejor receta para alcanzar la victoria. A esas dos condiciones de unidad y sacrificio, está acostumbrado el pueblo de Guamá, quien como siempre, seguirá adelante.
