Este 21 de agosto comienza a aplicarse la vacuna Abdala a toda la población de este santiaguero municipio de Guamá a partir de los diecinueve años de edad.
La información la obtuvimos de la médico especialista en Nefrología, Nereida Peña Aguilera, quien dirige en Chivirico, principal área de salud en este territorio, todo el proceso de vacunación contra la Covid-19.
La doctora explicó que comenzarán primeramente con aquellos pobladores mayores de sesenta años de edad, luego los de cuarenta a cincuenta y nueve, para evitar aglomeración en los puntos de vacunación, ya tienen un listado de las personas asistir por días, información que se le hace llegar a través del personal de apoyo en cada consultorio, ya sea a través de los líderes formales de la comunidad o quienes realizan las pesquisas, a todos los registrados en el levantamiento que se dispone.
Se ha establecido como estrategia que en cada consultorio haya dos vacunadores que pueden ser dos enfermeras o en su defecto si faltase una, se cubrirá con un estomatólogo y la cifra prevista es de cien pacientes por días, a razón de cincuenta por cada uno.
Chivirico es el principal núcleo poblacional de Guamá, pueblo cabecera administrativamente y dónde mayor número de contagiados con el virus Sars-Cov-2 y se reitera que el esquema de vacunación se cumplirá estrictamente según lo previsto hasta la tercera dosis separadas una de ellas con catorce días. Sólo en Chivirico en esta ocasión quedarían inmunizadas cerca de ocho mil quinientas personas e insistió en que la vacuna Abdala es efectiva para todas las variantes de Covid que transitan en Cuba.
La facultativa explicó que los únicos criterios de exclusión para no aplicar la vacunas es a quienes le ha dado la Covid, que han sido positivos evaluados en los muestreos, no aquellos que supuestamente hayan atravesado la enfermedad en sus viviendas y una vez realizado el exámen PCR dieron negativos. También se excluirán quienes resulten alérgicos al Timerosal.
Se incluirán en esta ocasión aquellas embarazadas y lactantes que no se vacunaron cuando le correspondía, ya sea por situaciones de síntomas respiratorios agudos como catarros, hipertensión descompensadas o infección urinaria.