Decir que se vive en Guamá, es que se aprecien diferentes los servicios, y más, cuando se andan más de 60 ó 70 km por la costa y luego se suben 15 o 17 hacia el firme de esta Sierra Maestra.
Con frecuencia se habla de los 157 de longitud del territorio y que ahora son recorridos por varias mujeres y siempre en busca de las encumbradas montañas para llevar el servicio de los llamados módulos a los pobladores, como expresa Pilar Hinojosa Cervantes dependienta de la TRD la Sierrita de Chivirico, la capital guamense, quien afirma con orgullo que: “ estamos yendo a los poblados más lejanos y la población tiene cultura sobre las ventas y esperan en las bodegas el día que les toca y entonces adquieren sus productos, que los preparamos con varios recursos ya sean de aseo, otras cosas necesarias, bebidas o cárnicos”
Organizado el servicio de venta de módulos por la dirección política y de gobierno, este ha llegado hasta las zonas más alejadas y montañosas del territorio para que la mayoría de la población obtenga algunos recursos y enfrente la situación que genera la terrible pandemia.
“La población nos espera y es muy solidaria, se sabe como son los campesinos, y cuando llegamos a uno de esos logares lejanos, la gente te recibe con hospitalidad, te brinda refresco y hasta almuerzo y te sientes bien, pues somos un equipo de mujeres que siente el placer por servir al pueblo, y además, estamos cumpliendo el plan económico de nuestra tienda.”
Con esa satisfacción se expresa Pilar Hinojosa quien ha subido a lo más alto de las serranías de Cuba a llevar un servicio agradecido y que manifiesta la disposición de la Revolución de no abandonar a su pueblo, aun en medio del bloqueo económico de los EU contra Cuba, que genera disímiles escaseces.
Destacada labor del colectivo de la TRD la Sierrita en la venta de módulos de productos a las zonas más alejadas y montañosas de Guamá.