Solo la mitad de los niños en edad escolar asistían a clases antes del triunfo de la Revolución, de ahí que una de las primeras tareas emprendidas por el Gobierno Revolucionario Cubano fuera la creación, en marzo de 1959, de la Comisión Nacional de Alfabetización y Educación Fundamental.
Un día como hoy nos recuerda el momento en el que Fidel, en la Plaza de la Revolución, junto a los alfabetizadores, declaró a Cuba “Territorio libre de Analfabetismo” (1961): “Hemos ganado una gran batalla, y hay que llamarlo así: batalla.
El Día del Educador permite apreciar cada año la colosal obra educacional que atesora la Revolución cubana que , transita necesariamente por la vinculación de la palabra con la acción y las convicciones con la conducta, como base del prestigio de los educadores.
Algunas de las transformaciones que se llevan a cabo en el sector educacional retoman hoy caminos ya transitados y otras emprenden nuevos senderos, que profundizan y agudizan la mirada para elevar la calidad de la educación, como propósito esencial de una Revolución que sigue muy de cerca la formación de sus hijos.
En esta fecha en que felicitamos a los educadores, sobre todo aquellos que fueron maestros voluntarios, alfabetizadores y otros que después llegaron a la montañas a llevar el pan de la enseñanza y a quienes apoyan esa tarea en cada escuela, reconocemos que todos estos cambios tienen en su base al maestro, que necesita del apoyo de toda la sociedad, en especial la familia, para que el fruto de su trabajo se revierta en más conocimientos para los niños y los jóvenes que se forman en las aulas.
Agregamos a lo anteriormente expresado, las hermosas páginas de humanismo que caracterizan el desempeño de varias generaciones de educadores que también fuera de fronteras contribuyen a la educación de los demás, con la aplicación del programa: Yo sí puedo, en naciones hermanas y otras misiones donde se pone en alto el Sistema Educacional Cubano
Son razones más que suficientes para que nuestros educadores, reciban hoy 22 de diciembre y todos los días, el homenaje de padres, hijos y pueblo agradecidos.
Felicidades educadores.