Ante el llamado de la máxima dirección de nuestro país, en cuanto a la imprescindible producción de alimentos como una de las tareas prioritarias en todo los tiempos, tenemos en este sentido en suelo guamense diversos ejemplos de habitantes que le dan cumplimiento con votos de fe y esperanza.
No solamente se siembra en las montañas como a veces se suele pensar. También en los terrenos de zonas urbanas, vemos a muchos ciudadanos que se empeñan en cosechar de su propio esfuerzo lo que llevan al plato cada día y Orestes Tornés, vecino de la cabecera municipal, es uno de ellos.
Este hijo de Guamá, que gusta de esta forma honrada en producir para subsistir y de esta vencer este reto ante las dificultades que se imponen en la vida, tiene sembrado en la parcela que le brinda sus frutos para el autoconsumo para él y su esposa, diferentes hortalizas, frutas y viandas como la yuca, ajíes, melón, un semillero de futuras lechugas, guayabas, quimbombó y un pequeño platanal.
Orestes se siente útil y satisfecho. No se rinde, nos dice: “hay que demostrarle a la Revolución que todavía puede contar con nosotros”.
