Casi mil millones de personas viven en zonas montañosas, y más de la mitad de la población del planeta depende de las montañas para abastecerse de agua, alimentos y energía renovable. Sin embargo, las montañas están amenazadas por el cambio climático, la degradación de los suelos, la sobreexplotación y los desastres naturales, con consecuencias potencialmente devastadoras y de largo alcance, tanto para las comunidades de montaña como para el resto del mundo.
Esta afirmación fue dada a conocer a los habitantes de la comunidad montañosa de Pinar de las Canas, en este santiaguero municipio de Guamá cuando se celebraba el día internacional de la montaña, en la víspera de la fecha escogida por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Habitantes de Pinar de las Canas, pioneritos de esa comunidad, ubicada a unos casi seis cientos metros sobre el nivel del mar en el consejo Popular de Bahia Larga, tributaron el reconocimiento en la actividad organizada para alentar las acciones que permitan preservar el medio ambiente. Al concluir y como es tradicional se efetuó la gran fiesta campesina, que incluye el brindis colectivo por el bienestar de las personas que viven en estas intrincadas lomas de Santiago de Cuba.