El reciente 22 de Julio se desarrolló en Chivirico, la capital de este municipio santiaguero de Guamá, el acto municipal por el 70 aniversario del 26 de Julio.
En esa jornada se puso de manifiesto la fortaleza de los años acumulados en experiencia y calidad de la actividad cultural.
Jóvenes talentos de la Brigada José Martí y aficionados, demostraron la justeza de la afirmación que hiciera el Líder de la Revolución Cubana, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz en una ocasión, cuando expresó que: “ la cultura es escudo y espada de la nación”.
La calidad, el sentimiento puesto en casa actuación y la demostración de altos gustos y valores estéticos, fueron rasgos que distinguieron cada momento.
Al interpretar la poesía: “Era la Mañana de la Santa Ana”, de Jesús Orta Ruiz, la jovencita Sajari Jardínez, lo hizo con elevada entrega de los sentimientos más sublimes, de una cubanía empeñada en defender las tradiciones de un pueblo amante de la historia.
En la actividad varias instructoras cantaron al Moncada con letras llenas de homenaje y expresiones de una identidad profunda y arraigada, por una generación nueva, que hace renacer la semilla de la Aurora del 26 de julio.
Con todos esos valores artísticos hubiera sido suficiente para embellecer una noche con la presencia de los habitantes de la capital guamense, pero no conforme con tamaño regalo, Edelmiro Salazar, Hijo pródigo de Guamá, regaló una larga composición, que retrató al Moncada, la figura de Fidel, los momentos de ayer y de hoy, y la firmeza de un pueblo guajiro, empeñado en no olvidar las raíces que llevaron a los muros de los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, a una juventud, solo comprometida con la patria.
En medio de aquella tormenta patriótica, la expresión masculina de la danza completó la noche, cuando varios muchachos encausaron el baile sobre un escenario lleno de los sueños y la esperanza de seguir adelante, de un pueblo verdaderamente amante de su identidad.
Juventud y pasión, están más firmes que nunca en las genuinas montañas de Guamá, sus ríos y costas, las montañas y sus paisajes, como símbolos, de que donde un día germinó la semilla de la Guerrilla Rebelde comandada por Fidel, hoy renace el legado de aquellos, que casi niños, dieron su vida para que el 26 de Julio de 1953, el apóstol de la independencia de Cuba: José Martí, no cayera en el año de su centenario.
Gloria a la cultura y el arte, como baluartes de la Nación Cubana.